invoco
el
silencio más perfecto que hay
entre
las ramas caprichosas de los abedules
mi
corazón
se lava la mugre enloquecida
en
un río espeso de plata
bebo
de las fauces de un ángel enamorado de otro ángel
¿qué clase de belleza podría saciarme así ahora?
ahora
que
he muerto